Víctor Manuel Casas Pérez
Dada la gravedad del cambio climático y el calentamiento global, se están presentando con mayor fuerza eventos climáticos; entre ellos, se está agudizando lo errático de la lluvia, y la intensidad de las temporadas de sequía.
Eso nos obliga a captar y almacenar el agua de la lluvia, cuando ésta se presenta, y a almacenarla, para no desperdiciar ni una gota. El agua que captemos servirá para usos domésticos, producción de hortalizas, riego estratégico de árboles frutales, dar de beber a animales domésticos, así como permitir que sacien la sed animales silvestres, aves, mamíferos y otros.
Por el costo de los materiales, es conveniente, que la construcción de un cilindro de ferrocemento sea una labor en la que participen varias familias o miembros de una comunidad, ya que del agua que se capte, se podrán beneficiar todos los participantes en su construcción. También puede ser obra que reciba apoyo gubernamental, de la delegación, municipio o alcaldía, si la autoridad comparte nuestra preocupación de escasez de agua en el medio rural. Como primer paso es necesario seleccionar un lugar en el cual exista un escurrimiento natura, un manantial o riachuelo, ya sea permanente o que sólo fluya durante la temporada de lluvias. Por pequeño que sea dicho escurrimiento, no hay que despreciarlo, y sí aprovecharlo. En las condiciones climáticas actuales, son acciones estratégicas y vitales.
Un ejemplo clásico y cotidiano, del tipo de construcción, es una tasa ordinaria de cerámica, que no debe ser ni tosca ni demasiado pesada.
Los pasos básicos por seguir son los siguientes:
Elegir el lugar donde en la temporada de lluvias se presente el escurrimiento o riachuelo.
El tamaño y capacidad del cilindro, dependerá de las condiciones del terreno, del presupuesto disponible, de las necesidades de agua: Esos factores ayudarán a definir el diámetro y profundidad del cilindro, ya que se requiere excavar hasta encontrar piso firme, y preferentemente también taludes firmes.
Si se cuenta con recursos, es preferible pensar en almacenar 100 mil litros de agua o más, ya que el factor, va a ser el diámetro del cilindro; aunque a mayor diámetro, se requerirá mayor cantidad de varillas metálicas, alambrón, electro malla y maya de gallinero.
La excavación se deberá hacer hasta encontrar piso firme, para evitar que el cilindro se ladee o se resquebraje. Según las condiciones del terreno, el cilindro podrá quedar parcial o totalmente enterrado. Pero, en cualquier caso, las puntas de las varillas verticales, deberán sobresalir de 30 a 40 centímetros, para fijar a ellas una malla de gallinero que evita que caigan al agua, todo tipo de animales que por sed bajen al agua y se ahoguen, o niños o alguna persona mayor.
La estructura del cilindro se fabrica a modo de una canasta de fibras. Las varillas verticales, deben partir de lo que será la base, de manera radial formando un nudo en el centro. Para ello es fundamental el uso de alambre recocido que se irá fijando con amarradores.
Una vez que quede armada la base del huacal, las varillas que van a ser los pilares de las paredes del cilindro, sin desprenderse, se doblan a posición vertical; como se señaló deberán tener el largo suficiente para sobresalir del borde superior, al menos 30 centímetros, para sujetar de ellas la malla de seguridad.
Coloquialmente nos referiremos al cilindro por el número de puntas que sobresalgan:
para 50,000 litros, 8 puntas para 80,000, 12 puntas para 100,000, etc.
En la ilustración se aprecia la labor de enjarre contra las paredes interiores del cilindro; las chimeneas por las que se llena y desagua una vez lleno, para que el agua excedente llene otros cilindros aguas abajo como un rosario; se ve el cilindro lleno; se aprecia la estructura de canaletas y filtro para captar agua del escurrimiento, y a los animales de la manada bebiendo en el abrevadero, relleno de piedras grandes para desmotivarlos a penetrar al abrevadero.
En la siguiente fotografía se ve el cilindro casi terminado, cuando los trabajadores, Lorenzo y Modesto, lo están puliendo. Nótese las láminas de triplay utilizadas para darle forma y poder enjarrar la mezcla de cemento, arena y festerbond, cinco por uno, etc. Para ello, se deben utilizar cucharas grandes. Es muy importante, no utilizar cal en la mezcla de arena, cemento y sellador ya que al disolverse la cal dejará minúsculos agujeros por los que se fugará el agua- Ese cilindro, está parcialmente enterrado, su capacidad fue 55,000 litros de agua.
En la fotografía inferior derecha se ven las canaletas limitadas por un murete de no más de 20 centímetros, cuya función es canalizar el escurrimiento del agua de la lluvia, al filtro lleno de tezontle, para filtrar impurezas y de ahí por tubería de PVC canalizar el agua a la chimenea de llenado del cilindro.
No se debe olvidar, dejar una salida para el agua en el fondo, a la que se fijará por dentro, una rejilla como las que se utilizan para drenar el agua de la regadera; y por fuera, se colocará la válvula de PVC, de 2.5 pulgadas de diámetro para desaguar el cilindro, en caso necesario. Es conveniente recordar que la construcción del cilindro, puede ser una labor de la comunidad.
En resumen, los pasos para construir un cilindro de ferrocemento para captar el agua de la lluvia son:
Ubicar un sitio donde la humedad nos indique, que, en la temporada de lluvias, escurre agua.
Construir canaletas de baja altura (20 cm o menos), que conduzcan el agua al lugar seleccionado para el cilindro.
Hacer la excavación del diámetro requerido para la capacidad del cilindro, hasta encontrar piso firme.
Para formar la losa del fondo, amarrar varillas a la mitad, para hacer un armado radial, doblando las puntas de las varillas en escuadra (90°), para que sobresalgan del borde superior del cilindro, al menos 40 centímetros.
La mezcla para colar la losa del fondo y enjarrar las paredes verticales del cilindro, debe ser exclusivamente, cemento, arena cernida y un sellador de reconocida calidad. De ninguna manera utilizar cal, porque ocasionaría la fuga de agua.
Antes de colar la losa del fondo, fijar el tubo con rejilla para la válvula de drenaje.
Al colar la losa del fondo asegurarse que poner suficiente mezcla en toda la orilla que formará la circunferencia del fondo del cilindro, para evitar futuras fugas de agua.
Armar el huacal, con las varillas verticales (a mayor diámetro del cilindro, mayor número de varillas, varillas horizontales a manera de cinchos, electro maya para reforzar la forma cilíndrica, y malla de gallinero para reducir los huecos y favorecer el enjarre.
Colocar láminas de triplay de 3 milímetros contra los taludes de la excavación, de manera que permitan el enjarre.
A medida que avance el enjarre de las paredes, se moverán las láminas de triplay, para utilizar sólo tres o cuando mucho cuatro láminas. En el enjarre, es importante humedecer los taludes para que fragüen correctamente las paredes.
Construir en la parte exterior del cilindro, la chimenea de acceso del agua, y la de desfogue del excedente, para abastecer futuros cilindros aguas abajo, para de ser posible, contar con un rosario de estos.
En el pulido de las paredes interiores y exteriores con cemento fino, esmerarse para asegurar que no se presenten fugas de agua.
Por último, fijar en las puntas de las varillas que sobresalen de la parte superior del cilindro, una malla que sirva para evitar que aves u otros animales, o niños, caigan al interior del cilindro y se ahoguen.
La construcción de cilindros de ferrocemento será una labor encomiable, en la que pueden participar varios miembros de la comunidad o ejido, para captar el máximo posible de agua de lluvia, lo cual dada la creciente agudización de las sequías tendrá cada vez mayor importancia.
Vmcp Jesús del Monte 21 03 2023. Revisado 24 07 23
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