Los riesgos epidemiológicos y el incremento de las zoonosis luego de situaciones de desastres naturales de origen hidrometereológico

 Aja-Guardiola, S1*; Fernández-Luciano, A2: Chávez-Quintana, R.3+ Román Díaz, A.M.4

1Departamento de Morfología. Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia.

Universidad Nacional Autónoma de México.

Secretario Fundador de la Sociedad Iberoamericana de Medicina Veterinaria de Desastre. (SIMVD).

2Presidente SCMVD. La Habana, Cuba. 

3Presidente Fundador de la Sociedad Iberoamericana  de Medicina Veterinaria de Desastre. (SIMVD). 

Presidente de la Sociedad Cubana de Medicina Veterinaria  de Desastre. (SCMVD), La Habana, Cuba (+).

+In memoriam.

*Miembro del Buró Ejecutivo de la SCMVD. La Habana, Cuba 

 ajavaca@unam.mx 

4 Biblioteca. Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia.

Universidad Nacional Autónoma de México


Resumen

Al analizar los eventos naturales llamados situaciones de desastres, es obvio considerar que las consecuencias más graves del resultado del evento será la introducción de “agentes de enfermedad” en zonas geográficas donde no existían y, también, se provocará una amplísima difusión y diseminación de esos agentes patógenos en territorios terrestres y acuáticos, en los que antes del evento no causaban grandes problemas, dada su limitada propagación. Con esta diseminación rápida, violenta y masiva de agentes patógenos, se desarrolla una situación de emergencia, y con ella, el desencadenamiento de una situación de desastre, la que ha provocado los requerimientos de actualización y preparación de los servicios médico-veterinarios y, la imperiosa necesidad de una especialización profesional en temas de desastres. Lo anterior, abre todas las puertas sobre teoría y práctica para actuación del profesional médico veterinario, sea en medicina de urgencia, medicina interna, traumatología, ortopedia, cirugía mayor y menor, etcétera, pero primordialmente, para los especialistas en salud pública veterinaria, epidemiología y epizootiología, donde el campo de acción para estos médicos veterinarios es extensísimo. La interrelación desastre/zoonosis, se basa primordialmente en la alteración del medio ambiente, la cual, proporciona todos los elementos necesarios para el favorecimiento de la presencia de agentes patógenos en una población animal y, con ello, el desarrollo de zoonosis y posterior afectación hacia el humano. 

Introducción

Por definición, las zoonosis son las enfermedades transmisibles. Pero esto comprende a dos grupos de enfermedades transmisibles. El primer grupo, que cumple realmente con el concepto de zoonosis, son aquellas enfermedades de los vertebrados no humanos, que pueden afectar accidentalmente al humano; en donde, los animales actúan en el papel de mantener en la naturaleza, -por tiempo indefinido-, diversas enfermedades. 

En el segundo grupo, están todas aquellas enfermedades en las que tanto el humano como los animales adquieren la infección a partir, del agua, del suelo, de vectores como invertebrados, de las plantas o del aire. En este grupo, las especies superiores no tiene un rol importante dentro del ciclo del agente etiológico, pero, sí pueden participar en diversos grados para su difusión, transmisión y distribución geográfica. 

Estas enfermedades afectan entonces a gran cantidad de especies animales, influyendo sobremanera en numerosas fuentes de alimentación de la especie humana. Por lo anteriormente dicho, tales enfermedades son un evidente ejemplo de la íntima interrelación que existe la salud pública, el medio ambiente, la epidemiología, la epizootiología, y, al final, el bienestar socioeconómico de la población humana.

Los desastres hidrometeorológicos son, en general, de origen natural. Como ejemplos están: las lluvias torrenciales y continuas, las inundaciones, las crecidas y desbordamientos de los ríos, ciclones, huracanes y tifones, maremotos, tsunamis, deshielos, ventiscas, nevadas intensas, aludes, deslaves y desprendimientos masivos de tierra por reblandecimiento por agua y, por otros eventos naturales que llevan a una situación de desastre de este tipo. 

Existen eventos provocados por el hombre o por sismos, en los que aparecen enormes cantidades de agua, por ejemplo: la ruptura de una presa, de un contenedor, la explosión defectuosa de un lugar de minería con ruptura de mantos acuíferos, entre otros. 

Al analizar los eventos antes mencionados, es obvio considerar que las consecuencias más graves del resultado del evento será la introducción de “agentes de enfermedad” en zonas geográficas donde no existían y, también, se provocará una amplísima difusión y diseminación de esos agentes patógenos en territorios terrestres y acuáticos (lagunas, lagos, represas, ríos, vertientes acuíferas, mar), en los que antes del evento no causaban grandes problemas, dada su limitada propagación. 

Con esta diseminación rápida, violenta y masiva de agentes patógenos, se desarrolla una situación de emergencia, y con ella, el desencadenamiento de una situación de desastre, la que ha provocado los requerimientos de actualización y preparación de los servicios médico-veterinarios y, la imperiosa necesidad de una especialización profesional en temas de desastres. Lo anterior, abre todas las puertas sobre teoría y práctica para actuación del profesional médico veterinario, sea en medicina de urgencia, medicina interna, traumatología, ortopedia, cirugía mayor y menor, etcétera, pero primordialmente, para los especialistas en salud pública veterinaria, epidemiología y epizootiología, donde el campo de acción para estos médicos veterinarios es extensísimo. 

Desarrollo

Dejando a un lado las causas del desastre o la presencia y diseminación de un tipo determinado de nuevos patógenos en un lugar geográfico cualquiera, es importante anotar, que dicha zoonosis puede aparecer y desarrollarse de diferentes maneras; a saber:

1) Por transferencia pasiva, causada por las aguas, por los vientos, por cualquier tipo de animales, tales como mamíferos, aves, insectos, o diseminadas por el mismo hombre (p. ej: movilización masiva de grupos de animales);

2) Por transporte activo, causado por personas y animales contaminados, padeciendo la enfermedad o en el período de incubación.

Un desastre siempre estará acompañado por las circunstancias inherentes al tipo del evento ocurrido. Dichas circunstancias revelan un estado de vulnerabilidad, (-que no existía previamente-), que favorece enormemente la transmisión y difusión de las zoonosis, ya que durante y después de la ocurrencia del evento aparecerán los problemas propios de la sorpresa, resultando en desorganización de los servicios médico-veterinarios y de salud.

Dentro de esta interrelación entre los riesgos epidemiológicos y la aparición de las zoonosis, es importante considerar someramente a algunos de los agentes patógenos que suelen manifestarse con mayor frecuencia y con mayor o menor probabilidad de difusión y transmisión en casos de desastres hidrometeorológicos. Así, entonces:

1) Por contacto directo, es posible la diseminación de enfermedades como: dermatomicosis, fungosis respiratorias, tuberculosis, brucelosis, rabia, fiebre Q, y otras; (estas enfermedades y otras de su tipo, suelen causar grandes estragos económicos);

2) Por contacto con cadáveres o restos de animales, es posible la diseminación del ántrax (carbunco bacteridiano), tétanos, tularemia, fiebre del Valle del Rift, del Nilo, y, además, leptospirosis y esquisostomiasis, que aparecen en lodos, barro y aguas contaminadas;

3) Por ingestión oral, tragar agua y comer alimento contaminados, se propagan el botulismo, salmonelosis, brucelosis, tuberculosis, ántrax, algunas parasitarias (helmintosis, teniasis, triquinosis, equinococosis), entre otras más; 

4) Por acción de insectos vectores, suelen aparecer las virosis, entre ellas las encefalitis virales, leishmaniasis, rickettsiosis, fiebre del Valle del Rift, y algunas más; 

En el breve conjunto antes mencionado, están las enfermedades de enorme importancia y relevancia interrelacionadas con la salud humana, que, aunque no suelen provocar grandes daños económicos, sí provocan graves afecciones y efectos devastadores en la población humana y, aunado a lo anterior, aparece el problema de que su proceso de control y erradicación puede llevarse un tiempo prolongado y muy desgastante en todo tipo.

Al hacer un análisis sobre las características propias de cada evento de desastre hidrometeorológico y al revisar cada uno de los efectos encontrados, podrá muy bien observarse que todos esos efectos del siniestro tienen una importantísima influencia directamente sobre la propagación de enfermedades y con ello, la vía de diseminación y propagación de zoonosis. Como se vio líneas arriba, los efectos del evento causante del desastre son la contaminación de aguas y terrenos, de las áreas de pastura, de los alimentos concentrados (si los había) y de los almacenados, la falta de agua de bebida, la movilización de animales y su posterior reunión y concentración. 

Dentro de este último punto, es importante considerar que la interrelación desastre/zoonosis, se basa primordialmente en la alteración del medio ambiente, es decir, la absoluta disfunción de los componentes ecológicos de un hábitat, que ha sido brutalmente alterado por acción de la propia naturaleza y que acaba (negativamente, por cierto) por modificar un hábitat particular que no podrá ser recuperado en poco tiempo, para así restituir a los animales al entorno en el que vivían antes. Aquí, es esencial analizar el espacio vital que perdieron los animales y que era “su casa natural”. Esto es, que el mismo instinto animal lo lleva a acudir y huir a terrenos geográficos menos desfavorables, con la intención de sobrevivir en un espacio vital en mejores condiciones ambientales. 

Con lo anterior, aparece entonces otro problema más de salud, ya que la movilización de los animales de un sitio a otro, ya sea en forma natural por ellos mismos o por la mano del hombre, provoca que se reúnan diferentes especies animales, con las más diversas edades y condiciones de salud (orgánica y emocional) y que dadas estas condiciones junto con el incremento de la densidad poblacional, puedan reunirse y convivir, animales sanos con animales enfermos, portadores o en estado de incubación de una o varias enfermedades, creándose condiciones idóneas para la infección, diseminación y propagación de enfermedades entre los animales, y, de ellos la transmisión hacia el hombre.

Los conceptos básicos vertidos aquí, dan sustento al aprendizaje adquirido en previas situaciones de desastre, lo que indica que sucedido el evento causante del desastre no son raros los “brotes” de enfermedades zoonóticas, como salmonelosis, leptospirosis y rabia, que no en pocas ocasiones afectan también a las comunidades humanas.  Obviamente que las enfermedades señaladas en este escrito no son las únicas, puesto que, a mediano plazo, -posterior al desastre-, con seguridad aparecerán alteraciones y cambios en la situación epidemiológica y epizootiológica de una zoonosis, y siempre, muy íntimamente interrelacionada con el “nivel-estado de enzooticismo” prevaleciente en la región geográfica afectada por el evento causante de desastre. 

Conclusión

La interrelación desastre/zoonosis, se basa primordialmente en la alteración del medio ambiente, la cual, proporciona todos los elementos necesarios para el favorecimiento de la presencia de agentes patógenos en una población animal y, con ello, el desarrollo de zoonosis y posterior afectación hacia el humano. 

Bibliografía

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    2. -   www.cenapred.unam.mx 

    3. -Chávez QP, Fernández LA, y Álvarez LJ; Manual de Procedimientos Veterinarios para Situaciones de Desastres Naturales Hidrometeorológicos. Editorial Mar y Pesca. La Habana, Cuba. 1999.

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    5. -Disaster relief is only one facet of world animal Society’s Mission. JAVMA. Vol. 190.636-637 No. 6 march 15, 1987. 

    6. -Heath SE: (1998) Manejo Internacional de Emergencias Veterinarias. Memorias del Simposio Internacional sobre la Intervención de la Salud Pública y la Protección de Alimentos en Situaciones de Desastres. La Habana, Cuba 18-20 marzo 1998.

    7. -Macías JM: (1992) El significado de la vulnerabilidad social frente a los desastres. Revista Mexicana de Sociología. núm 4. Universidad Nacional Autónoma de México. México, Distrito Federal. 

    8. -Maskrey A: El manejo popular de los desastres naturales. Intermediate Technology Development Group. Lima, Perú. 1989.

    9. -The Office of Environmental Health and Safety. (2003) Waste management decision tree.  7/29/03     United States of America.

    10. -www.redcross.org 

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