Felipe
Román López
Esta fecha, quizá para muchos, no
signifique más que un día para recordar, que se ha vuelto tradicional y, por
tanto, rutinario. Por ello es conveniente que hagamos un poco de historia para
divulgar el significado y la trascendencia de esta fecha.
La enseñanza médica en la Nueva
España se inicia con la fundación de la Real y Pontificia Universidad creada
por Carlos V, el 21 de septiembre de 1551, adaptando las constituciones de la
Universidad de Salamanca y, tan solo precedida por la Universidad de San Marcos
en Lima, fundada en el mes de mayo del mismo año.
Por decreto de la Real Audiencia
se declara fundada la Cátedra de Medicina el 1 de mayo de 1578.
Desde 1570 en España se trata de
uniformar la curricula de todas las Universidades Españolas y las de su área de
influencia, separando a partir de esa fecha la Escuela de Cirugía, sobre la
base de los Colegios de Cádiz y Barcelona, con las cátedras de Anatomía,
Fisiología, Técnicas Quirúrgicas, Clínicas Quirúrgicas y Medicina Legal.
En el México Independiente se
propuso un cambio en los sistemas de enseñanza apoyados por el partido liberal.
El 30 de
marzo de 1833 ocupa la presidencia de México el Gral. Antonio López de Santa
Anna y la Vice-presidencia el Dr. Valentín Gómez Farías. En ese año, por
ausencia del Presidente, el Dr. Gómez Farías ocupa la presidencia en forma
interina en 4 ocasiones. En la 3ª, en el lapso del 5 al 27 de Octubre, emitió
los decretos para modificar la instrucción pública. Primero suprimiendo las
funciones de la Universidad Pontificia y creando 6 Establecimientos, bajo la Dirección General
de Instrucción Pública: el 1º de Estudios Preparatorios, el 2º de Estudios
Ideológicos y Humanidades, el 3º de Ciencias Físicas y Matemáticas, el 4º de
Ciencias Médicas, el 5º de Jurisprudencia y el 6º de Ciencias Eclesiásticas. El
documento o decreto emitido el 23 de Octubre de 1833, era el inicio de la
reforma radical planeada, asignando al Establecimiento de Ciencias Médicas, las
siguientes cátedras: Anatomía General y Patológica, Fisiología e Higiene, 1º y
2º de Patología Interna y Externa, 1º y 2º de Clínica Interna y Externa,
Materia Médica, Cirugía y Obstetricia, Farmacia Teórica y Práctica y Medicina
Legal.
En el Capítulo IV, artículo 14,
los prerrequisitos para ingresar, eran: 2 cursos de latinidad, 1 curso de
francés, aritmética, algebra, geometría y lógica, física, historia natural,
botánica y química.
En el capítulo V, artículo 18,
para obtener el grado académico se indica: 1.- Acreditar haber cursado todas
las materias señaladas. 2.- Aprobación del examen particular de cada materia.
3.- Aprobación del examen general: examen, lectura de la disertación señalada
previamente por la Dirección.
Para el 27 de Noviembre se
enlista el Profesorado: Director: Dr. Casimiro Liceaga. Sub-Director: Dr. José
María Benítez. Anatomía: Dr. Luis Jecker.
Y Dr. Salvador Rendón.
El Establecimiento de Ciencias
Médicas quedó alojado en el Convento de Bethlemitas, desde el 27 de noviembre
de 1833, hasta el 24 de octubre de 1835.
Al día siguiente de la iniciación
de cursos, Santa Anna regresa y desconoce la fundación del Establecimiento,
dejándole sin subsistencia legal. Tres meses después restableció la Universidad
Pontificia y todos los colegios a la situación previa.
Todos los Centros recién
inaugurados tuvieron que cerrar sus puertas, con la única excepción del
Establecimiento de Ciencias Médicas que, por disposición del gobierno, previa
evaluación favorable, se cambió de nombre a Colegio de Medicina.
En febrero de 1835 se reanudan
las actividades gracias al empeño y peculio del Dr, Liceaga. El Colegio de
Medicina ocupó diversos locales, como: los domicilios particulares de los
profesores, convento del Espíritu Santo, Colegio de San Ildefonso, colegio de
San Juan de Letrán y convento de San Hipólito, hasta 1853.
A partir de 1854 el gobierno
prestó el edificio de la Inquisición y en 1856 propuso la venta del edificio en
$50,286.00, a cubrir con los salarios caídos que les adeudaban a los profesores
y el saldo, de aproximadamente $5,000.00 en efectivo.
En 1824 las materias que se
impartían, eran: Prima de Medicina, Vísperas, Método, Anatomía y Cirugía,
Matemáticas. Impartidas por los Dres. Febles, Liceaga, Schiller Osorno,
Calvillo y Joaquín Guerra, con los siguientes libros de texto: Fisiología de
Bichat, Aforismos de Hipócrates, Bresdave, Lecera y Bails.
AL RECORDAR CADA AÑO EL 23 DE
OCTUBRE, SE RINDE UN TRIBUTO A UN GRUPO DE MEDICOS EXCEPCIONALES, QUE CAMBIARON
EL DERROTERO DE LA MEDICINA MEXICANA, PESE A LOS MULTIPLES OBSTACULOS QUE
TUVIERON QUE VENCER.
No hay comentarios:
Publicar un comentario